¡El medio ambiente es responsabilidad de todos!

Vivimos en una CASA del tamaño del MUNDO. Y si esta morada es tan grande, por supuesto, la compartimos con otras personas, animales, plantas y otros seres vivos. Por lo tanto, podemos decir que compartimos el mismo MEDIO AMBIENTE. Y aunque no lo parezca, dependemos el uno del otro como un gran castillo de naipes. Podemos decir que todo lo que puedes ver, oír, tocar, oler y sentir es parte del medio ambiente. Ya sea algo natural o hecho por el hombre.

La relación del hombre con el medio ambiente tiende a ser más completa y realista cuando interactuamos con temas socioeconómicos. Haciendo esto, nació el término SOSTENIBILIDAD. La sostenibilidad es hacer uso de los recursos naturales de manera planificada y organizada, promoviendo el desarrollo económico, pero asegurando su continuidad para las generaciones futuras. Por lo tanto, para que algo se considere sostenible, de hecho, debe ser ecológicamente correcto, socialmente justo y económicamente viable. Por lo tanto, actualmente se llama Conservación y no Preservación. La preservación es algo que no se puede cambiar, mover, frecuentar. La conservación es algo que se puede disfrutar, compartir, pero usar con conciencia, es decir, saber cómo usar.

Entre las actividades más comunes que podemos realizar en la conservación del medio ambiente se encuentran las prácticas del llamado 3R: Reciclaje, Reutilización y Reducción.

Para ilustrar la importancia del proceso de Reciclaje, tomamos como ejemplo las latas de aluminio. Con esto hemos reducido algunos impactos ambientales «directos» como la extracción de mineral bauxita (mineral de aluminio) y en la reducción de energía eléctrica; ampliamente utilizada en el procesamiento de bauxita. En impactos indirectos, este reciclaje inhibe la eliminación de las latas en vertederos o, incluso, en basurales.

En la Reutilización, podemos pensar en la botella PET. Hechas de un tipo de plástico derivado del petróleo, el Politereftalato de etileno. Que, además de los impactos ambientales inherentes a la extracción de petróleo, necesita energía y agua para su confección. Hoy, junto con el reciclaje, la producción artesanal como Reutilización de las PET es grande: macetas y regaderas para jardines, escobas, lámparas, juegos educativos, entre muchos otros fines. El mismo PET también participa en otra acción ambiental al recolectar aceite de cocina. Garantizar la seguridad y la practicidad en un embalaje adecuado hasta la eliminación y el destino adecuados.

Por último, pero no menos importante, la Reducción en la generación de residuos. Como todas las acciones son de comportamiento. Esta no sería diferente. Depende única y exclusivamente de cada uno. Al comprar bienes o productos:

– Intenta evitar los productos desechables y elige los duraderos;

– Elige productos con embalaje retornable o que tengan recargas;

– Haz las compras con bolsas ecológicas, que pueden usarse muchas veces, minimizando la cantidad de bolsas de plástico y compra lo que realmente necesitas;

– Guarda un poco de agua de tu lavadora, en tu hogar, puede ser útil para lavar las aceras e incluso enjuagar los desechos reciclables;

– Ten una cisterna de recolección de agua de lluvia para reutilizarla en las actividades de lavado de aceras, descarga de inodoros y para actividades de jardinería;

Pero, en el lugar de trabajo, también debemos pensar en la sostenibilidad:

– Diluyendo los productos de limpieza adecuadamente, de acuerdo con las especificaciones de la etiqueta y no «a ojo», evitando así el desperdicio de agua y del producto en sí;

– Tratando las máquinas, accesorios y equipos de protección personal con el debido cuidado, con el objetivo de conservarlos, ya que con durabilidad, podemos hacer reemplazos a más largo plazo;

– Siguiendo conscientemente el plan de trabajo, ya que si la limpieza se mantiene continuamente, no será necesario gastar tiempo, energía y recursos para restaurar el ambiente para que sea saludable;

– Apagar las luces al salir de la habitación, cerrar los grifos al final del uso;

– Separar los desechos de acuerdo con las especificaciones y dar el destino apropiado;

– Trabajar con conciencia, comunicarse asertivamente y mantener una postura ética. Indudablemente, los buenos ejemplos contribuyen a un ambiente saludable, ya que se evitan los conflictos y, sobre todo, los retrabajos; además, facilita las relaciones interpersonales. 

            Hay varias acciones que podemos hacer para conservar el medio ambiente. Mientras podamos reducir el envío de desechos sólidos reciclables/reutilizables a los vertederos, mientras podemos separar el aceite de cocina y las lámparas y darles el destino correcto, minimizaremos los impactos ambientales.

Cada pequeña acción que hacemos tiene un impacto en el mundo. Por eso te proponemos: ven con nosotros, ¿respetas el medio ambiente? Ven a FACOP.